Plato para: 4 personas
Tiempo de preparación: 50 minutos
Dificultad: Fácil
Calorías: 190
Ingredientes:
- 1 kilo de espinacas
- ½ litro de agua
- ½ litro de bechamel
- 100 gramos de queso parmesano rallado
- Sal y pimienta
Preparación:
Se lavan las espinacas y se trocean. Se hierven en agua con sal durante unos 20 minutos.
Mientras tanto, se prepara la bechamel y se salpimienta al gusto. Para prepararla, se necesita ¾ de leche, una cucharada de harina, 20 gramos de mantequilla, sal y nuez moscada. Se pone en la sartén la mantequilla; cuando esté fundida, se echa la harina, removiendo para que no se queme. Se vierte la leche, moviendo para que no se hagan grumos. Por último, se añade la sal y un poco de nuez moscada.
Una vez cocida la verdura, se retira del fuego y se escurre; seguidamente, se pasa por el pasapurés.
Se mezcla este puré con la bechamel, regulando el grado de espesor de la crema con el caldo sobrante de las espinacas. Si fuera necesario, se rectifican la sal y la pimienta.
Se dispone la crema en una fuente y se espolvorea con el parmesano; puede servirse frío o caliente.
Recordad: Este plato es muy recomendable por su alto contenido en fibra e hidratos de carbono de absorción lenta, así como por su escasa aportación de grasas y azúcares simples. Podéis sustituir la mantequilla por aceite de oliva virgen extra. El sentido de esta receta es daros una pequeña idea para que podáis ir variando, adaptándola a vuestros gustos, por supuesto de manera sana, saludable y sabrosa.
Bon Appétit!